¡Adiós 2019! Cerrando Ciclos desde la Visión Existencial
¡Adiós 2019! Cerrando Ciclos desde la Visión Existencial
Por Psct. Mónica Ortega Quiroz
Photo by Sven Read on Unsplash |
Otro año más que se nos va, brindis, festejos, fin de cursos, navidad y rituales que nos recuerdan que este tiempo, el año 2019, terminó, tal vez fue un año de grandes logros pero probablemente también estuvo acompañado de frustraciones y dificultades.
Muy comúnmente escuchamos de la importancia de cerrar
ciclos, de completar experiencias, sobre todo, este pensamiento de “cerrar” es
muy propio de la Psicoterapia Gestalt.
¿Pero qué opinamos de esto en la Psicoterapia Existencial?
En la Visión Existencial nos gusta hablar de posibilidades,
por lo tanto, “cerrar” o “terminar” algo sería correspondiente a un fin de
posibilidades y fin de posibilidades significa estar muerta. El atributo de la
muerte o finitud, es uno de los cinco atributos existenciales.
Cuando una persona firmar los papeles del divorcio, en
realidad no pone fin a la relación con esa persona en particular, más bien,
pone fin a la a la posibilidad de seguir siendo pareja y abre nuevas
posibilidades, tanto de reformar la relación entre ellos, sobre todo si tiene
hijos, o de continuar una relación de pareja con alguien más, pero en realidad
hasta que uno de ellos muera, la relación no termina.
La finitud es un atributo que no sólo tiene que ver con
estas muertes metafóricas como el fin de año, graduaciones, mudanzas o divorcios,
sino que también tiene que ver con reconocer nuestras limitaciones en nuestra
vida. Algunas de estas límites que la pida nos pone son la enfermedad, la edad,
el cansancio, la crisis económica y las pérdidas en general, y todas ellas
pueden ser motivo de asiste a una consejería o terapia.
¿Pero por qué es importante hablar de la muerte y estos
ciclos que “cierran”?
1. Nos ayuda a establecer prioridades y reconocer la
importancia de aprovechar a los y lo que más amamos.
2. Nos invita a elegir mejor, ya que nos recuerda que la
existencia no puede posponerse y aún hay tiempo para vivir. Mientras viva hay posibilidades.
Y en palabras del propio Irving Yalom: “aunque el hecho
físico de la muerte nos destruye, la idea de la muerte nos salva”.
Así es que este fin de año, es un buen momento para revisar
¿cómo hemos vivido hasta ahora y cómo queremos hacerlo en los años venideros?
¡Feliz cierre de este 2019!
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